Pesimista, qué se le va a hacer

Bueno, mucho tiempo sin poner nada... aunque para lo que me va a salir ahora tampoco merece la pena que escriba. Pero no puedo dejar de hacerlo, de una forma o de otra, y ahora lo siento mucho pero no saldrá nada positivo. Me estoy volviendo una pesimista poco a poco, algo que siempre he odiado, pero bueno, una cosa más que añadir a la lista de defectos. De todas formas hoy sólo puedo pensar en las cosas de las que estoy hasta... ejem, dejémoslo en que estoy harta.

Estoy harta de que me digan que soy una blanda porque no es verdad.

Estoy harta de estar siempre en medio.

Estoy harta de que me digan lo que tengo que hacer.

Estoy harta de no saber si estoy haciendo daño a alguien.

Estoy harta de que se quejen por todo lo que digo.

Estoy harta de que nadie tenga nunca ganas de hablar.

Estoy harta de ser la que mantiene la paciencia, pero no porque se agote sino porque veo que no sirve de nada.

Estoy harta de que mis palabras no sirvan de nada, ni nada de lo que haga.

Estoy harta de sentir que no puedo hacer nada para hacer cambiar las cosas de mi vida que no me gustan.

Estoy harta de tener que medir siempre mis palabras.

Estoy harta de equivocarme, después de todo quizá soy yo la que necesita tener siempre la razón.

Y sobre todo estoy harta de este curso, estoy deseando que se acabe ya, y no sólo por el instituto, sino para olvidar todo y a todos y no tener que encontrarme todos los días en la misma situación, sin saber qué hacer. Desconectar y olvidar todo o esperar a que a alguien más le dé la gana hablar de todo lo que pasó en Italia.